Borja Cembrero comenzó su carrera en una startup en Australia, lleno de entusiasmo y ambición. Sin embargo, el camino del emprendimiento no siempre es fácil, y tras enfrentarse a varios fracasos, decidió regresar a España y trabajar en Zara, una experiencia que lo llevaría a un inesperado descubrimiento.

Un día, mientras observaba las largas colas de devoluciones que eran más largas que las de compra, Borja tuvo una revelación: el problema con las tallas estaba afectando profundamente a la industria de la moda. ¿Por qué nadie había hecho nada al respecto?

Con una actitud de "mejor pedir perdón que pedir permiso", Borja se lanzó de lleno en su idea. Así nació Naiz Fit, una solución que permite a las marcas resolver el eterno reto del ajuste perfecto en cada paso de la cadena de valor de la moda, desde el diseño hasta la entrega final.

Sin pedir permiso a nadie, Borja empezó a contactar con marcas y a ofrecer su solución, confiando en que su visión era lo que el mercado necesitaba. Y no se equivocaba. A medida que la empresa ganaba tracción y acumulaba clientes leales, Borja se enfrentó a una nueva encrucijada: ¿cuál es el modelo de financiación adecuado para hacer crecer Naiz Fit?

Entre las opciones que surgieron, una compañía que cotiza en bolsa ofreció comprar su empresa, lo que lo llevó a una nueva reflexión: ¿Cuál será mi papel en esta empresa que construí desde cero?

En este episodio del podcast, Borja comparte en primera persona cómo, sin pedir permiso, logró superar obstáculos, aprovechar oportunidades y transformar un simple concepto en una solución innovadora que está revolucionando la moda.